Este pensamiento filosófico lo he descubierto esta mañana a las 21 y poco.
Al comienzo de la retransmisión por Tv del sorteo de la Lotería Nacional.
Imagina; escenario del sorteo con una niña del colegio de San Ildefonso que se equivoca....llanto, mocos, nervios...al lado su compañero y casi una decena de hombres TRAJEADOS impotentes. IMPOTENTES y lo repito, IMPOTENTES sin un puto PAÑUELO desechable que ofrecerle a la criatura....¿Sera posible?
Yo lo he visto.
Y me pregunto lo mismo supongo que las madres de la foto pendientes de sus crios que asisiten a algún espectáculo callejero. ¡ HOMBRES TENÍAN QUE SER !
Y nos lo dicen con razón. ¿Que coño llevamos en los mas ó menos, 10 bolsillos de un traje? ¡ NI UN PUTO MOQUERO !
Así dejan luego los retretes de gotitas y los calzoncillos amarillos. Tanto traje y tanta pose y son unos GUARROS.
¿Y que hacen, un suponer, en un servicio público si no hay papel higiénico?. Seguramente
salir como si nada, incorporarse al grupo y esperar que el pis ó la zurraspa no sea muy li-
quida y se absorva con los gayumbos. Y dejar para el siguiente usuario del water el espectáculo lamentable de su dejadez. Que pena. Vaya este post de urgencia a las que limpian los servicios estos días de cenas y celebraciones y que junto a las madres que crían son las únicas que valoran llevar moqueros a todas partes, incluso antes que el móbil. Ojalá les toque a ellas solas el Gordo que se lo merecen. Y a los del traje pañuelos de hojalata para que espabilen y se corten.